Postales de Leningrado - *B*

La inocente y creativa imaginación de unos niños reconstruye el pasado guerrillero de sus padres. Esa es la base argumentativa del largometraje Postales de Leningrado de la directora venezolana Mariana Rondon, su segundo trabajo como cineasta. Un filme conmovedor tal vez por las bien logradas interpretaciones infantiles. Cuenta además con un reparto bien actuado encabezado por Laureano Olivares y personajes creíbles, una fotografía medianamente cuidada y una banda sonora que le imprime un sutil sentimentalismo. Los efectos especiales juegan un papel importante por que le dan cierta originalidad, esa originalidad de la imaginación infantil a la obra. Tal vez el factor negativo mas relevante de esta pieza sea el ritmo en el desarrollo de la misma, a veces se hace tediosamente lenta. Después de ver esta producción tengo un buen presagio del cine hecho en Venezuela. Me quite el mar sabor de boca de las últimas mamarrachaditas nacionales. Definitivamente lo mejor que se ha hecho recientemente acá en la nación. Conmovedora con una dosis de realismo mágico.